Foto: Walac.pe
La gastronomía peruana va más allá del popular ceviche, y un claro ejemplo de ello es el popular anticucho, el cual es tan importante y consumido por los peruanos como cualquier otro plato.
Esta delicia culinaria también tiene muchos años de historia, y se basa prácticamente en una carne ensartada en un palito de caña que va siendo cocinada a la parrilla, y al mismo tiempo, se le van agregando otros elementos como algunos vegetales que mejoren su sabor.
Una tradición que no pasa de moda
Se sabe que el anticucho ya era preparado desde el siglo 16, en pleno auge del Imperio Inca. En ese entonces se preparaba con carne de llama, la cual era condimentada con ají y algunas hierbas para posteriormente empezar a cocinarla. Pero fue gracias a la conquista española que se cambió la carne de llama por la de res, para adaptarla mejor al paladar europeo y de futuras generaciones.
De esta mezcla cultural es que se fue adaptando el plato a lo que es hoy, pues los españoles tenían la costumbre de colocar los trozos de carnes en un palito y macerarlos con vino y condimentos. Hasta ahora se mantiene en esencia esta preparación con los anticuchos, esencialmente al usarse la carne del corazón de res.
¿De dónde proviene la palabra “anticucho”?
Esta peculiar palabra tiene origen quechua, aunque aún se sigue estudiando su verdadero significado. Para algunos historiadores, esta palabra viene de unir el quechua “anti” que significa delante con “cucho” que significa cortar.
Para otros analistas de esta lengua, como el lingüista Noé Lara, este criollismo tiene origen de la palabra “uchu” que significa ají y “anti” que significa ande.