En el día a día nos va a suceder que tenemos “problemitas” o “inconvenientes” con personas que forman parte importante en nuestras vidas y con los que tenemos un vínculo emocional muy cercano. Estas situaciones (porque prefiero llamarlas así y quitarles la etiqueta negativa) aunque a veces pueden ser pequeñas nos causan incomodidad y deterioran de cierto modo nuestras relaciones, apartándonos del bienestar y la armonía que esa relación nos pudiese estar dando.
La razón por la que escribo sobre esto es porque es algo que me sucede, aun cuando soy una persona que medita, y que practica yoga, entre otras cosas, son situaciones que vivo en ocasiones con familiares, amigos cercanos y mi esposo. Lo que me ha llevado a la conclusión de que: 1) nuestro crecimiento nunca se detiene, estamos en constante aprendizaje; y 2) siempre hay maneras de mejorar, sólo es cuestión de buscar más.
Estas situaciones son muy comunes, y más aún cuando se trata de seres con los que compartimos todos los días. A veces sucede que nosotros queremos algo en específico y la otra persona quiere todo lo contrario y esta polémica nos lleva al choque de personalidades, causando así un inconveniente entre ambos. Si te pasa esto con tus familiares, mejores amigos y/o con tu pareja, no eres el único, en realidad nos pasa a todos. ¿Pero qué podemos hacer cuando nos encontramos en momentos como esos, tratando de convencer a ese ser que tanto amamos que tenemos la razón?
Me sucede mucho cuando estoy bajo estrés, cometo muchas veces el error de hacer planes y quiero que todo se dé justo como lo había planeado, y a veces, o casi siempre las cosas no salen exactamente como lo planeamos. El querer controlar las situaciones es precisamente lo que me lleva a chocar con las demás personas.
La cosa es que si sabemos que van a haber muchísimas situaciones donde no podemos controlar todo y nunca debemos controlar a otros, entonces debemos de encontrar una manera para que esto no afecte nuestra armonía. La realidad es que situaciones como estas siempre van a formar parte de nuestra vida, lo que queda es tomarlas de la mejor manera y buscar mejoras.
Aquí te dejo tres pasos que yo sigo cuando me encuentro en situaciones de este tipo:
Recuerda, el tener diferentes ideas y opiniones siempre será parte de nosotros, la importancia es saber callar cuando sea necesario sin abandonar nuestras creencias, pero permitiéndoles a otros que puedan expresarse también.
Este es un espacio para el alma que aborda los aspectos espirituales que son tan importantes en nuestras vidas pero que muchas veces no tenemos tiempo para afrontarlos. Alessandra Da Rocha, Gestora de Hospitalidad y certificada en la práctica del Reiki nos ayuda a hacerlo.