El cambio abrupto de clima que se está viviendo este otoño en Toronto es bastante notable. Sin embargo, el pasado viernes 2 de noviembre la temperatura subió con el concierto de Descemer Bueno en el Adelaide Hall. El ambiente estaba en su punto yel público se comenzó a reunir desde temprano con mucha actitud y muchas ganas de ver a este gran artista.
Descemer Bueno es un productor, compositor, y músico, considerado uno de los más destacados cantantes cubanos de la época. Su llegada a Toronto, sin duda, fue una de las más esperadas por los fanáticos que ya estaban listos para bailar al ritmo de sus más populares éxitos.
Para felicidad del público, Descemer subió temprano al escenario y en cuestión de minutos el lugar se llenó. Los asistentes estaban listos para esta gran noche, y es que el concierto de un artista de su talla era para no perdérselo.
El cubano interpretó temas como Tus luces sobre mí, Amor Bonito, Loco, Quédate, Por tu amor, Nos fuimos lejos, Siete días, Bailando y Súbeme la radio, siendo estas dos últimas las más conocidas a nivel mundial.
La gente se la pasó increíble aquella noche. La organizadora del evento, Sophie Giraud, nos comentó sobre la emoción del público y como había personas de distintas nacionalidades, lo cual es prueba de los fieles seguidores que tiene Descemer Bueno en todo el mundo.
El carisma y los movimientos de este artista fueron clave para acentuar su actuación en el escenario, así como la pasión y emoción emitida en cada melodía. Además, es importante mencionar el gran equipo de trabajo con el que contó Descemer.
Lo acompañaban sus músicos habituales, con los que ha compartido en múltiples ocasiones escenario, por lo que se podía notar esa complicidad del trabajo de equipo. Aquella, sin duda, fue una noche llena de música, baile y pasión que nos trasladó por un par de horas a La Habana.
