Foto: nuchylee
Existen dos programas que el Gobierno Federal pone a disposición de los ciudadanos si tienen problemas financieros. Dependiendo de cada caso, la persona puede optar por alguna de estas estrategias que lo ayudarán a salir de deudas:
Propuesta al acreedor
Es el programa que más personas eligen. Su popularidad se debe a los beneficios que ofrece, principalmente porque te permite reducir tu deuda en una tercera parte o incluso hasta en un 70% (dependerá de cada caso).
También puedes pagar la deuda hasta en 60 meses, sin intereses.
Otra característica es que el historial crediticio se verá afectado por tres años.
Requisitos:
- Evaluar el ingreso mensual
- Tamaño de la familia
- Evaluar los bienes
- Saber si alguna vez antes se declaró en bancarrota
Para que la propuesta sea aprobada, el acreedor deberá calcular en base a los datos que el solicitante brinda.
Bancarrota
Se podría considerar como la segunda o última opción a optar. Una de las razones es porque – a diferencia de la propuesta – el historial crediticio se afectará por hasta seis años, y es muy difícil obtener un crédito, e incluso aplicar para la compra de un carro.
Declarase en bancarrota debería aplicarse cuando las deudas son demasiadas altas y por el contrario los ingresos de la persona o la familia son escasos.
Recomendaciones de la experta
Cada caso es diferente, por lo que el primer consejo que la asesora Verónica Cariceo comparte es que “no hay que confiar en lo que se escucha de las amistades o familiares”.
Efectivamente, los acreedores calcularán en base al perfil del solicitante, de todos los datos personales (ingresos, historial crediticio, tipo de familia, etc.).